Santo Domingo. -El representante ejecutivo para la reforma policial, José Pepe Vila del Castillo, catalogó los niveles de corrupción dentro de la Policía Nacional como «elefante blanco»,
«Lo digo así de claro, histórica, sistemática (era la corrupción). Llevada de un director a otra, impulsada desde la cabeza y obligando al último raso a pertenecer y todos aquellos que no pertenecían al sistema, fueron apartados, fueron perseguidos o fueron metidos en despachos pequeños en donde yo me los he encontrado», declaró.
Vila del Castillo consideró el proceso de transformación de la institución del orden como una lucha contra «la lacra de la corrupción».
«La Policía Nacional antes de Eduardo Alberto Then, porque tuve el honor de venir aquí durante tres semanas a diagnosticarlo, era una Policía Nacional que tenía tres grandes lacras y una gran ventaja. Las tres grandes lacras eran: la corrupción interna, institucional y sistemática, dirigida desde la propia dirección general hasta el último raso», reveló.
En el 2022, resaltó, ha sido la primera vez que avalado por el presidente Luis Abinader, dirigido por Interior y Policía y con el consenso de la Policía, todos los ascensos fueron limpios y transparentes.
Vila se refirió a los avances logrados en la reforma policial en los ocho meses de ejecución, con mejoras en las gestiones financieras, auditoría de personal, dignidad para los agentes y modernización a todos los niveles en la infraestructura.
Cambios en la cúpula
Vila del Castillo manifestó que en mayo pasado tuvieron que cambiar de arriba a abajo la cúpula de la Policía, y poner a generales y coroneles alineados con el espíritu de la transformación.
Todos los actuales generales del Consejo Superior Policial han sido evaluados desde el punto de vista profesional e integridad. También fueron evaluados y probados los 525 coroneles para la asignación de sus funciones en todo el país, en procura de un cuerpo disciplinado y humano.
En gran parte de la Policía, expresó Vila del Castillo, están reconstruyendo todo aquello que fue desmantelado por presidentes, ministros y directores de Policía.
Entiende que la Policía es un reflejo de la sociedad. Una policía corrupta, es una sociedad corrupta. No hay una Policía sin Sociedad, y no hay una sociedad sin Policía.